Si tu césped tiene demasiadas malas hierbas, deberás aplicar un herbicida total a tu jardín usando un concentrado. Si son sólo unas pocas, lo mejor es que uses un herbicida selectivo, que solo eliminan el tipo de mala hierba que te afecta. En cualquiera de los dos casos, ¿cuándo debes echar herbicida al césped?:
El mejor momento para aplicar un herbicida es cuando las malas hierbas están creciendo activamente. Es decir, desde abril hasta finales de septiembre o principios de octubre. Hay que dar tiempo a que todas las malas hierbas hayan salido ya. Por eso conviene no hacerlo en las fases más tempranas de la primavera.
Para que el procedimiento sea más efectivo contra un abanico más amplio de malas hierbas, intenta empezar en mayo. Si tienes que repetir el tratamiento, aún tendrás mucho tiempo antes de que la estación fría lo haga inútil. Lee la etiqueta de tu herbicida para asegurarte de que permite tratamientos repetidos.
Uno de los mejores momentos para hacer un control de malas hierbas en tu jardín es a finales de agosto o septiembre, cuando el clima todavía es cálido. Si tu jardín sólo necesitas una sesión de herbicida al año, este puede ser el mejor momento. Las razones para esto son:
- es el momento en el que tendrás casi todos los diferentes tipos de malas hierbas.
- las semillas de primavera de tu jardín habrán germinado, así que también las tienes.
- eliminar las malas hierbas en otoño es más fácil que hacerlo en primavera después de que el invierno las haya robustecido.
- tendrás un jardín libre de malas hierbas hasta que la siguiente tanda de malas hierbas germinen durante la primavera siguiente.
Recomendaciones para usar un herbicida
- Hazlo cuando el suelo esté húmedo. Si está seco, puedes dañar el césped.
- Cuando sea probable que no llueva en las siguientes 48 horas. Tampoco riegues en ese período de tiempo.
- El césped sí debe estar seco. Si no, la hierba mojada diluirá la potencia del herbicida.
- Cuando no haya viento, para que no se disperse a zonas que no quieres. Tampoco si se prevén heladas (en primavera y en otoño puede haberlas).
- Evita también que haya demasiado calor y luz solar.
- Si lo aplicas en verano, es mejor hacerlo en las tardes, cuando vaya remitiendo el calor.
- Tras la fertilización, deja que el fertilizante actúe durante una o dos semanas. Después encárgate de las malas hierbas para que tenga más efecto.
- Si el césped es muy joven, no conviene aplicar un herbicida. Las siegas regulares suelen ser suficiente para eliminar las malas hierbas. Cuando el césped madure, será momento de ir a por las más resistentes.
- Después de segar el césped, deja por lo menos que pasen 2 días si vas a aplicar un herbicida líquido a todo el jardín. Y no cortes el césped hasta por lo menos 3 días después.
- Si cortas el césped justo antes de aplicar herbicida, no lo dejes demasiado corto. Si haces esto y cortas las hojas de las malas hierbas también no habrá nada sobre lo que aplicarlo.
- Los herbicidas son productos químicos. Es obligatorio seguir todas las recomendaciones de la etiqueta: condiciones de uso y riesgo del producto. Respeta la dosis indicada por el fabricante. Recuerda que está prohibido aplicarlos cerca de pozos, arroyos y fosas, porque puede contaminar el agua freática.
¿Con qué frecuencia puedes usar un herbicida?
Todo depende del tipo de herbicida que estés usando. Cada fabricante tiene recomendaciones diferentes según el producto del que se trate. Lee las etiquetas y sigue las instrucciones.
Los hay que sólo requieren un tratamiento anual. Una práctica razonable puede ser 2 tratamientos anuales usando dos herbicidas totales con ingredientes activos diferentes.
Además, es probable que sólo necesites hacerlo con esta frecuencia durante los dos primeros años para librarte de las malas hierbas más establecidas.
A partir de ahí, posiblemente con un tratamiento único en septiembre o principios de octubre puede ser suficiente para el resto del año.
Si tienes cuidado de tu césped es posible que no necesites un tratamiento total de malas hierbas durante varios años, si no simplemente algún tratamiento específico para alguna mala hierba particular que pudiera aparecer traída por el viento.
¿Cómo se prepara un herbicida natural?
Si no quieres arriesgarte a usar un herbicida químicos la contaminación que puede provocar en los alrededores, las fuentes de agua, a otras plantas y el riesgo que suponen para niños y mascotas, te queda la posibilidad de preparar un herbicida natural.
Para ello, hazte de los siguientes ingredientes y aparatos:
– vinagre (3 litros)
– sal (1 kilogramo)
– una pequeña cantidad de detergente para lavavajillas
– un pulverizador de presión retenida
Combínalos y déjalos reposar por lo menos unos cinco minutos. Cuando esté listo, introduce la mezcla en el pulverizador de presión retenida y aplícalo sobre la superficie que desees limpiar de malas hierbas.